Bajo un cielo vibrante de guitarras eléctricas y sentimientos intensos, el Corredor Cultural Carranza vivió una noche memorable con la presentación de Jimmy Huerta, Los Villanos Blues Band y Juan Carlos Cortés Blues Band, quienes hicieron del blues el protagonista en una velada cargada de energía, nostalgia y conexión emocional.
Ante un público de más de 500 personas, el concierto comenzó con el talento local de Jimmy Huerta, cuya ejecución poderosa y sincera dejó en claro que el blues tiene raíces profundas en Aguascalientes. Su estilo, cargado de autenticidad y energía, encendió el escenario y preparó el terreno para una noche inolvidable.
Desde Guadalajara, Los Villanos Blues Band –antes conocidos como Naranjito Blues Band– ofrecieron un viaje musical que inició en 2007, precisamente en Aguascalientes durante el Festival Aguas con el Blues. Su regreso al estado simboliza el crecimiento sostenido de este género en el país y su permanencia como expresión artística vibrante.
El cierre de la jornada estuvo a cargo de Juan Carlos Cortés Blues Band, que regresó a este escenario tras una década. Con más de 20 años de trayectoria en la escena nacional, Cortés ofreció un repertorio de alto nivel técnico y emocional, en el que el blues se convirtió en vehículo para narrar historias locales y universales, conectando con la audiencia desde lo íntimo hasta lo colectivo.
“Esta noche dedicada al blues forma parte del compromiso por promover la diversidad cultural y ofrecer espectáculos gratuitos y de calidad al público durante esta temporada de feria”, señaló Iván Sánchez Nájera, director del Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura (IMAC).
Blues: un género con alma que sigue creciendo en México
El blues, nacido en las comunidades afroamericanas del sur de Estados Unidos, ha encontrado en México un espacio fértil para su expansión y reinterpretación. Lejos de ser un género limitado a ciertos públicos, el blues mexicano ha crecido en fuerza y autenticidad en las últimas dos décadas, gracias a músicos comprometidos con preservar su esencia mientras lo adaptan a contextos locales.
Eventos como el del Corredor Carranza demuestran que el blues tiene un lugar sólido dentro del panorama cultural nacional, y que Aguascalientes está jugando un papel clave en ese crecimiento al brindar espacios de calidad para su difusión.
Estas noches musicales no solo son espectáculos, sino encuentros entre generaciones, tradiciones y nuevas formas de sentir, donde la guitarra se convierte en voz, y la emoción, en lenguaje universal.
Fotografia: Cortesia del Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura (IMAC).
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